ACERTIJOS — Todos con Dante

Llevadera es la labor cuando muchos comparten la fatiga. Camelot.

Gilberto Haaz Diez

Se anunció el fin de semana pasado, una declaración de Sergio Gil, delegado estatal del partido Movimiento Ciudadano (MC), que Dante Delgado Rannauro sería un excelente candidato al gobierno de Veracruz y lo apuntó con una terna, que no son corcholatas. Muchos sospechan que Dante no quiere, ni puede, porque tiene en la buchaca la elección presidencial y tiene, además, el estado de Jalisco, donde con una candidata ganaría ese estado. Pero en Veracruz se le mueve su corazoncito alvaradeño-cordobés y algunos otros piensan que sería un buen gobernador los primeros dos años, y así sumaría los otros cuatro que hizo en tiempo pasado, para gobernar un sexenio, luego se iría a lo suyo y dejaría un interino, que ya no sería de Morena. En la lista de Gil, nombró a otros: José Manuel del Rio Virgen, una gente de sus confianzas, que sufrió cárcel cuando en el Senado contaba con alto cargo, salió después libre y sin fianza. También nombró a Ignacio Rey Morales Lechuga (1947), originario de Poza Rica, una gente que ya fue candidato en tiempos de Chirinos y ha sido Procurador de la Republica con Carlos Salinas, famosísimo por que fue a detener al presunto criminal intelectual del periodista Manuel Buendía, José Antonio Zorrilla Pérez. Nacho Morales fue también Embajador en Francia, de donde es originaria su esposa, subsecretario y secretario de gobierno de Veracruz, presidente del Colegio de Notarios y Rector de la afamada Escuela Libre de Derecho, donde estudian puros picudos. Paréntesis. (Hace poco hablé de la Libre de Derecho, y mi pariente, el orizabeño Jorge Ramón Galland, me notificó que su padre, el notario Enrique Galland Naredo, salió de allí con mención honorifica). Los candidatos proliferarán. Una vez en Orizaba, en aquel tiempo de candidato, asistí invitado a una comida en el hotel Plaza Palacio, organizada por su amigo, el abogado Miguel Ángel Lujan Mata (QEPD), allí habló Morales Lechuga de aquel incidente, cuando en una estación de radio pretendían coartarle su libertad de expresión, su esposa también narró aquel día de espanto. Dante solo sabrá cuál es su juego en ese tablero de ajedrez, donde los jaques mates al rey son una final anticipada. En el ajedrez suelen decir que: ‘El rey es una pieza de pelea’. Y Bobby Fischer, expresó: “En el ajedrez hay dos tipos de jugadores: los buenos y los duros. Yo soy de los duros”. Venga, pues

ESA AUTOPISTA LIBRE

Hacia exactamente 21 días y unas cuantas horas, que Yo Mero no rolaba rumbo a Veracruz. La ola de calor ahora lo tiene a uno resguardado y apanicado, enconchado como cuando tienen a un boxeador en las cuerdas. Pero heme allí el sábado que partí y la alegría más grande es reconocer que todos estábamos en lo cierto, que esa maldita caseta de Capufe de Fortín solo atrasaba y hacia las colas largas y creaba accidentes, en ese tramo o más adelante, porque era muy lenta para el cobro. Cuando el secretario Jorge Nuño y el presidente AMLO, siguiendo las recomendaciones del paisano cordobés-orizabeño, José Luis Palomares, dieron luz verde para dejar de cobrar, aquello se convirtió para nosotros en nuestro Disneylandia, la cruzamos felices y no por el no-pagar, no, porque eran horas y horas que lo tenían a uno en las demoras, este mundo de Orizaba-Fortín-Córdoba, ya no fue el mismo, fue superior a cualquiera y un mundo de estrellas nos quisimos bajar. El sol calentaba. Se anunciaba un fuerte calor, cuya temperatura llegaría arriba de los 40 y con el factor humedad, pues suda hasta aquellito. Las casetas ahora sin problema, la de Cuitláhuac y Paso del Toro, paso tranquilo, pagamos y adelante. Llegué a Plaza Américas al café consuetudinario (¿Qué demonios será consuetudinario?) En Don Justo, el café jalapeño de la familia de Manolo Fernández, grandes cafetaleros de varias generaciones. La gente se refugia en las plazas, la calor, diría Minga, atonta, y allí se está fresco, lo mismo tomando un café o un chesco o visitando y comprando en las tiendas, hay ofertas ahora. Mandé recoger en Veracruz, unos zapatos para los niños de la Casa Hogar La Concordia, obsequiados por doña María Guadalupe, historia para estos días, muy agradecidos por esos niños.