AL ESTILO MATHEY — Horario ¿de qué?

Gustavo Cadena Mathey

Domingo de Ramos, pero también de sorpresas.

Semana propicia para recuerdos, evocaciones para veteranos de la vida.

Primero por despertar y levantarse a las seis de la mañana en pleno Domingo de Ramos sin haberlo planeado; inicio de las vacaciones, cuando el celular trasnochado apenas te marca las siete.

Serán cuestiones terrenales o celestiales de estos tiempos, o lo más probable, de horarios gubernamentales de invierno o de verano, manejados por ineptos que casi cinco años después aún no se les prende el foco de lo que iban a iluminar, pero sin culpa del daño que hayan causado a la República y al Peje.

Despertar un poco antes y encontrar aviso de Héctor Yunes Landa que recorre de madrugada las peligrosas carreteras veracruzanas en su legítimo afán como el de Pepe, el de Julen, el de Sergio, el de Nahle y otros aspirantes que buscan la candidatura para gobernar con capacidad, sapiencia y sensibilidad, a los paisanos.

Por supuesto y a su debido tiempo usted sabrá a quién elegir para que trabaje por mejorar tantas cosas que deja pendientes la morenita mía.

Pero asoo, a diferencia de otros, HéctorYu manda video, se ve todo cansado, dice que son las 2:25 de la mañana. Que viene de una gira que inició ¡el sábado de la semana pasada¡, por Paso del Macho, Coatzacoalcos, Minatitlán y de ahí se aventó hasta Pánuco, Tampico Alto, Ozuluama, Tuxpan, Naranjos, Chinampa de Gorostiza, Tamalín, Citlaltepec, Tempoal, Chicontepec y apenas pocas horas antes, salía de Benito Juárez.

¡Vaya¡, de qué tamaño es el deseo de servir, pero los demás, no se sabe que se chinguen así.

Solo alguien de mis admirados lectores que no sea reportero y se haya lanzado en esas travesuras de recorrer Veracruz en campañas políticas con estos infernales calores y ahora riesgosos caminos lo podría entender.

Y como lo dice HY: “si alguien se pregunta por qué ocupamos un lugar privilegiado en las encuestas para la gubernatura de Veracruz, esto es parte de la respuesta”.

Pero le decía es Semana Santa, “Semana Mayor” dicen los indecisos y hay que cumplir el ritual que nos inculcaron nuestros padres.

Y les decía al principio también de sorpresas, porque para concluir la misa dominical, allí en el templo de la Divina Providencia donde alguna vez vi a los Ahued, casi terminaba la ceremonia cuando un inteligente señor de respetuosas canas y lento caminar se acercó a la banca del reportero y sorpresivamente le susurró al oído: ¡arriba el Diario de Xalapa!

Con la alegría del asunto ya de salida, le agradecí y Don Juan Hernández, me halagó: “Uhhh, te leo desde hace muchos años. Conocí a Rubén Pabello”.

Gracias por esa satisfacción Don Juan, y a los lectores con los que vivimos esa paridad o como se llame.

Mi gratitud eterna porque en Acayucan y en el Diario hice maestría y doctorado en la Universidad de la Vida en la que me inscribieron mis padres, con inicios invaluables ahí en Ávila Camacho Tres, como tantos valiosos compañeros.

Gracias a Dios. Recuerde, cuide el agua, busque la forma, siembre plantas, no tempestades.

gustavocadenamathey@hotmail.com