CONTRAPUNTO — OTRO MÁS

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Por Juan José Contreras Lara

No es para nada extraño que, en Tezonapa, ubicada en esa feraz y cálida zona cañera que colinda con Cosolapa, Oaxaca, se susciten hechos de violencia. Ese es, por decirlo amablemente, el pan nuestro de cada día para los habitantes de la región, sin embargo, las detonaciones de armas de fuego escuchadas el domingo en céntricas calles de aquella ciudad cobraron impacto por la relevancia de una de las víctimas.

Me refiero a Alexis Sánchez García, ampliamente conocido en esa parte del estado por ser empresario y político. El personaje había sido un controvertido diputado local y actualmente ocupaba la Secretaría de Servicios Administrativos de la Legislatura estatal, por lo que era cercano al líder congresista, Juan Javier Gómez Casarín. Además, murió en el ataque su hijo menor de edad y su esposa resultó herida de gravedad. Los detalles de los hechos ya han sido ampliamente difundidos. De los victimarios, como siempre, ni sus luces.

No obstante que Sánchez García fue su compañero de actividades políticas, pues era militante de Morena, el crimen no mereció ni siquiera una respuesta presencial por parte del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, quien solo a través de un video de dos minutos, acompañado por la fiscal general del estado, Verónica Hernández Gadiáns, dijo lo mismo de siempre, lamentó los hechos, reiteró que no habrá impunidad y sí castigo para los homicidas. La misma retórica reiterativa y hueca de quien mal gobierna Veracruz. 

SIGUEN DE MALAS

Le llueve sobre mojado al gobernador bailarín. Todo indica que le saldrá caro el capricho de extinguir el Tribunal Estatal de Justicia Administrativa de Veracruz (TEJAV), para crear el Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Veracruz (TRIJAEV), que suenan más o menos igual, pero son totalmente diferentes. El primero sí aplicaba la justicia en ese ramo lo hacía sin atender a compromisos, el segundo es un ente inventado por Cuitláhuac con la complicidad del líder del Congreso, Juan Javier Gómez Casarín, para administrar justicia a modo de los intereses de la 4T.

Pero estos personajes son tan torpes y mediocres, que ni siquiera esas chapucerías saben hacer. La Suprema Corte de Justicia de la Nación acaba de anunciar que tanto el poder Ejecutivo como el Legislativo de Veracruz podrían ser multados por no atender la determinación que ordenó suspender los cambios en el TRIJAEV, o en su caso se podría iniciar un proceso judicial contra los diputados locales.

No sería la primera vez en que la SCJN le enmienda la plana y pone en evidencia a la actual e incluso a la anterior legislatura. Por lo menos en los últimos tres años, en doce ocasiones la Corte ha echado para abajo total o parcialmente, actos legislativos que llaman la atención tanto por su irracionalidad o por la desvergonzada intención de quedar bien, de manera por demás rastrera, con el Ejecutivo, pues no hay que olvidar que la mayoría congresista es de Morena.

En ese tiempo, la Corte ha declarado la inconstitucionalidad en temas de carácter electoral, comunicación social, ultrajes a la autoridad, desaparición forzada, matrimonios igualitarios, protección a la vida desde la concepción, modificaciones a la Constitución local y discapacidad de las personas.

No habrá que esperar mucho para saber qué sucederá con los dos tribunales administrativos, el de a deveras y el que se sacó Cuitláhuac de la manga, porque la Corte puso de plazo quince días para que enmienden su cochinero. Veremos qué sucede.

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