OPINION MANUEL HUERTA — Los libros de texto

3 min read

Loading

Manuel Huerta Ladrón de Guevara

Fue enorme la discusión generada esta semana que terminó por el anuncio de los nuevos libros de texto. En redes sociales o entre los chat de WhatsApp, todos tenían una opinión acerca de los nuevos libros, que rompen con todo el modelo tradicional de enseñanza en este país.

Los libros, que aún no han sido repartidos a los estudiantes por estar ellos en periodo de vacaciones, fueron filtrados a una televisora que los utilizó para golpear, una vez más, a la administración de AMLO, repitiendo en todas sus señales un discurso único sobre el peligro ideológico que traerán, según el dueño de la televisora, los libros en la niñez mexicana.

Algo que llama la atención fue que, en su conferencia por la mañana del 2 de agosto, mientras explicaba en su conferencia los daños que causa la evasión fiscal, el Presidente mencionó el litigio que el dueño de TV Azteca tiene contra el gobierno para no pagar 18 mil millones de pesos que debe de impuestos; por la noche del mismo día, en el noticiero principal de la mencionada televisora, el conductor estrella arremetía, con libros en mano, contra lo que él decía es el regreso del “virus del comunismo” y arengaba “…buscan convertir a los niños en esclavos de una dictadura comunista”. Otra vez invocaron al fantasma del comunismo con el que asustaron durante el proceso electoral del 2006.

El extremo fue cuando el presidente del PAN, Marko Cortés, hizo a sus simpatizantes y en especial a los padres de familia la invitación a quemar los nuevos libros de texto gratuitos. No pocos le recordaron que fueron los nazis y fascistas quienes quemaron libros en Europa y Latinoamérica durante las eras de terror totalitarias y nacionalistas.

Hay que recordar que la derecha en este país, desde que fueron creados los libros de texto gratuitos durante el mandato del presidente Adolfo López Mateos, se opuso a ese plan. En un viaje del Presidente al conservador estado de Guanajuato para la inauguración de una obra en 1963, decenas de niños aparecieron a su paso con carteles que acusaban que “El texto único es una vergüenza para México”, la anécdota, contada por Jaime Torres Boded, secretario de Educación en aquel tiempo, devela que tanto ayer como hoy, la derecha conservadora se opone a todo lo que de un poco de libertad.

La conservadora televisora quiso causar miedo, y gracias a que ahora todo el mundo puede emitir una opinión, se encontraron con una resistencia a su discurso que quizás si esperaban, pues sabían que lo que decían era mentira. Fue impresionante ver la diversidad de opiniones que, a diferencia de las no razonadas, se tomaron el tiempo para sustentar y argumentar bien sus dichos.

Se sabe que el cambio principal en los nuevos libros es que dejarán de estar divididos por materias como Matemáticas, Español, Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, etc. Ahora los libros traerán contenidos que transversalizan los diversos conocimientos y los presentan en problemas de la vida real (ya era tiempo) para que niñas y niños aprendan a resolverlos, y lo mejor, aprendan a resolverlos juntos; su contenidos tienen una dimensión social, humanística y científica.

Estamos seguros que este cambio será para bien, pues como sentenció el Presidente: los libros de texto no son comunistas, son humanistas.

Comparte en redes sociales: