PUNTO DE VISTA — Los nuevos libros de texto
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Filiberto Vargas Rodríguez
Prefacio.
El tema lo llevo a la “mañanera” el corresponsal en la Ciudad de México del portal “Vanguardia” de Veracruz. *** Se refirió al caso de Marlen Esmeralda Esquivel, quien fue detenida por elementos de la Policía Ministerial de Veracruz, ya que la Fiscalía del Estado la acusa de secuestro agravado. *** El reportero le explica al presidente: “La causa o proceso penal está radicado ante el juez Francisco Reyes Contreras, juez de control de Xalapa. Quien está siendo imputada como secuestradora fue a ese lugar para reclamar una unidad que le robaron, un tráiler, y ahí se originó este asunto, supuestamente son delincuentes de la zona, donde acudió junto con la policía para poder recuperar ese vehículo”. *** Y continuó: “No lo logró; sin embargo —ella originaria es del Estado de México—, después de seis meses, la Fiscalía de Veracruz la fue a detener hasta San Felipe del Progreso el 18 de noviembre del 2021. Fue trasladada al penal de Pancho Viejo. Y en ese ir y venir ha habido una serie de irregularidades. (Los abogados defensores) han presentado pruebas, sin embargo, éstas no han surtido efecto. Ahorita ya fue trasladada a un penal de máxima seguridad en Cuernavaca, Morelos”. *** Y finalmente la demanda: “Ella pide que se revise este caso, se le atienda y de esa manera ella pueda obtener la libertad bajo todas las reservas y también con todas las pruebas que ella está entregando junto con su abogado. Ella dice que es una situación de injusticia y por eso pide esa revisión”. *** La respuesta del presidente fue escueta, pero contiene una instrucción: “Le vamos a pedir a Rosa Icela Rodríguez (secretaria de seguridad y Protección Ciudadana) lo que tiene que ver con la señora que está detenida; que revise el caso para ver si, como lo solicita, puede llevar su proceso en libertad”. *** A ver si ahora sí le hacen caso al presidente en Veracruz. Ya ven que Éric Cisneros no renunció y tampoco retiró sus espectaculares.
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Presto, como siempre, a responderle a todo aquel que cuestione las decisiones de su jefe, Cuitláhuac García Jiménez enfiló este miércoles sus baterías contra el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, quien llamó a los padres de familia de todo el país a desechar los libros de texto gratuitos que se distribuyen para el próximo ciclo escolar, y exigió al gobierno federal que cumpla la sentencia judicial que impide su distribución.
“A todos los padres de familia del país, los exhortamos a que, ante el probable desacato de López Obrador, desechen los libros de texto que den a sus hijos o al menos les quiten las hojas que ustedes consideren que no son convenientes para la educación de sus niños”, dijo.
Como si hubieran ofendido a un ser muy preciado de su familia, el gobernador de Veracruz utilizó sus redes sociales para responderle al dirigente partidista: “La campaña del PAN: ¡a quemar los libros!, ¡destruyan los libros! Eso es lo que propone la derecha retrógrada: destruir los libros”, escribió.
Y agregó: “P.D. Me quedó la duda ¿en qué época exactamente nos quieren gobernar?, ¿en el futuro o siglos atrás?”.
Por supuesto que el gobernador veracruzano no dio el contexto de las palabras del dirigente panista. Hay ya un abierto y contundente rechazo a las modificaciones que el gobierno federal pretende hacer a los libros de texto gratuitos, al grado de que el tema se llevó a la justicia federal, donde un juez concedió la suspensión y ordenó que dichos libros no fueran distribuidos hasta que se diera una explicación clara de los mecanismos utilizados y las consultas realizadas para hacer dichas modificaciones.
Este mismo miércoles el diputado federal veracruzano Pepe Yunes dijo ver con preocupación el adoctrinamiento que se pretende generar con los nuevos libros.
“No es un tema menor, es un tema que hay que atender; primero porque los libros de texto como el diseño de políticas públicas, debe estar creado por un conjunto de expertos, sujeto objetivamente a técnica y en ninguna circunstancia con sesgo ideológico, y mucho menos de coyuntura. Lamentablemente, por lo que se escucha y se ve, los libros de texto están adoctrinando más que formando a los jóvenes y eso es inadmisible”.
Pepe Yunes les reconoció a los padres de familia y a la sociedad que están pendientes de una situación tan delicada y comentó que desde la Cámara de Diputados se está trabajando en esta coyuntura que compromete el futuro del país.
“Los diputados de la Cámara trabajamos en este tema desde la perspectiva legal y posiblemente a través de la Comisión de Educación pero directamente se tiene que atender, desde los órganos con autonomía aunque estén desconcentrados de la SEP, que están integrados más allá que por militancia, por cuadros que acreditan su conocimiento, su trayectoria en la elaboración de políticas públicas, lamentablemente estos órganos están siendo sesgados tanto en el aspecto educativo como en el que se puedan imaginar en la actual administración”.
Pepe Yunes dijo que han sido varios sectores de la sociedad los que se han pronunciado, no sólo la Unión Nacional de Padres de Familia que dijo que irá hasta las últimas instancias en el tema jurídico para evitar que se distribuyan estos libros, sino también el Instituto Mexicano de Competitividad.
El IMCO publicó un estudio sobre los riesgos de estos libros para el nuevo plan de estudios y advirtió que “el nuevo plan de estudios no considera la educación como una herramienta para la formación de capital humano”.
En dicho estudio se anticipa que los nuevos libros generarían estudiantes carentes de habilidades imprescindibles para su futuro profesional, además de romper la conexión entre la educación básica y la media superior, lo que podría resultar en mayor abandono escolar. “El nuevo plan de estudios pierde el foco de habilidades básicas como las matemáticas y la ciencia”.
Pepe Yunes dijo que es evidente cómo se están pronunciando ante la mala calidad de estos textos y con argumentos, organizaciones apartidistas, por lo que el gobierno federal no puede decir una vez más que es un ataque de adversarios o politiquería.
“El IMCO es otro órgano que hace parte de la sociedad civil, apartidista completamente, que trata desde sus perspectivas asuntos de carácter público y el de la educación es fundamental; entonces son voces de personas calificadas que no tienen militancia, que hay que atender y que llevan a la conclusión de que se está haciendo mal desde el gobierno; el gobierno quiere adoctrinar desde la niñez para generar algún tipo de posicionamiento y pertenencia posterior”.
Los gobiernos de Morena no pueden salir ahora con que “yo ya edité los libros, y si no permiten que se distribuyan están atentando contra la educación”.
No ha habido una argumentación sólida, ¡ni una sola!, por parte del gobierno federal, para justificar las barbaridades que pretenden cometer con las próximas generaciones de mexicanos.
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Epílogo.
Revisen el siguiente texto y díganme a quién les recuerda: “El doctor Américo es una gente honesta, recta. Siempre lo he dicho, el pueblo de Tamaulipas supo decir ‘basta’ y eligió a un gobernador honesto, íntegro, que no se tenía en Tamaulipas en mucho tiempo. Un gran pueblo, un estado con mucho potencial económico, con la frontera, que es una gran oportunidad para el desarrollo económico y comercial con Estados Unidos, muchas ventajas comparativas, pero muy malos gobiernos, muy malos gobernantes. Entonces, ahora sí tienen un buen gobernador y yo espero que las cosas marchen mejor”. *** ¡Qué pena que Cuitláhuac García no sea el único merecedor de esos elogios!
